El origen de las cariátides griegas

La Acrópolis de Atenas da albergue a una serie de maravillas que dan cuenta del esplendor de la arquitectura griega, que se caracterizó por el balance de sus elementos y por la mesura de sus decorados.
La arquitectura griega está marcada por la simetría, la pureza y desde luego por la función. Nada de lo que se ve en un antiguo edificio clásico está ahí por conciencia y ninguno de los elementos que conforman los conjuntos son simples detalles deliberados. Ese es el caso de las bellísimas cariátides griegas, que además de cumplir una función muy específica en la estructura del Templo de Erecteión de la Acrópolis de Atenas, encierran tras sí una historia impensable.
Las cariátides griegas: Testigos mudos de la historia
Las cariátides griegas son columnas que en vez de mostrar un orden específico como lo hicieron el resto de las columnas griegas del periodo, fueron cuidadosamente esculpidas para representar los cuerpos de hermosas mujeres. Desde luego que este curioso detalle no es puramente decorativo, ya que las esculturas realmente actúan como columnas soportando el peso de la edificación.
Las nobles damas carias
La historia indica que la creación de las cariátides griegas fue inspirada durante un oscuro periodo en el tiempo de las guerras médicas (que ocurrieron en el siglo V A.C), momento en que Caria y otras ciudades perdidas del Peloponeso se enfrentaron a los helenos al unir fuerzas con el poderoso imperio persa.
Caria fue una las primeras ciudades que fue arrasada por la alianza griega, cuyos ejércitos, asesinaron a sus hombres y tomaron por esclavas a sus mujeres, a las que condenaron a llevar enormes cargas en sus espaldas durante su tortura y castigo.
Es esta imagen de dolor la que inspiró las columnas del templo de Erecteión, que pese a la truculenta historia implicada, se considera una de las más deslumbrantes muestras de la arquitectura clásica que sobreviven al tiempo.
Comments are closed.